¿Cómo saber si tu corredor hace bien su trabajo? Conozca errores comunes al mostrar tu propiedad.

Emilia Szulczyk
19 jun
2 Min. de lectura

6 errores comunes al mostrar tu propiedad que disminuyen la probabilidad de venta

Elegir un buen corredor de propiedades puede ser la diferencia entre vender rápido y al mejor precio… o tener tu casa meses publicada sin éxito. Muchos propietarios no saben qué esperar de un servicio profesional, y confían ciegamente sin evaluar si el trabajo está bien hecho. Aquí te contamos los errores más comunes que cometen algunos corredores al mostrar tu propiedad —y cómo identificarlos.

errores comunes al mostrar tu propiedad

❌ Error 1: Fotografías de mala calidad

Un corredor que no invierte en buenas fotos está perdiendo oportunidades desde el primer momento. Fotos oscuras, movidas o mal encuadradas hacen que tu propiedad pase desapercibida.

✅ Lo ideal: Fotografías profesionales, buena iluminación y encuadres que destaquen lo mejor del inmueble.

❌ Error 2: No preparar la propiedad antes de mostrarla

Mostrar una casa con camas desordenadas, olor a humedad o desorden en la cocina genera una pésima impresión.

✅ Lo ideal: El corredor debe dar recomendaciones de orden, limpieza, iluminación y detalles antes de cada visita.

❌ Error 3: Falta de conocimiento de la propiedad

Si el corredor no sabe cuántos metros tiene la terraza o no puede responder preguntas básicas, transmite poca profesionalidad.

✅ Lo ideal: Conocer todos los datos técnicos y ventajas del inmueble, y comunicarlos con seguridad.

❌ Error 4: No adaptar el discurso al cliente

Algunos corredores repiten el mismo discurso a todo tipo de visitantes, sin considerar si están comprando para vivir, invertir o arrendar.

✅ Lo ideal: Escuchar primero y adaptar la presentación según el perfil e intereses del comprador.

❌ Error 5: Mostrar sin crear experiencia

Una visita no es solo “abrir la puerta”. Un buen corredor crea ambiente: música suave, olor agradable, temperatura ideal y una narrativa que conecta emocionalmente.

✅ Lo ideal: Hacer que el comprador se imagine viviendo ahí.